Noticias
ENCUENTRO FORMACION PERMANENTE SEMINARIO TERCERA EDAD
- Por Sor Rosa Suazo
- En: Noticias provinciales
- Publicado 30 Ago 2012
- Visto: 19429
En la última asamblea de la CICSAL (Conferencia Interinspectorial del Cono Sur de América Latina) en Paraguay, (mayo 2011), se le confió a las hermanas del equipo de formación permanente de la conferencia, la tarea de Promover una reflexión que lleve a propuestas concretas sobre la Tercera edad.
Al término del curso de formación para hermanas de 56 a 65 años, el equipo, acogiendo esta invitación, se ha reunido para organizar este encuentro que sería una réplica adaptada a nuestra realidad, del Seminario de América realizado en México en marzo 2010.
Con el anhelo de nuestras Provincias de afrontar este tema de modo que, después de la profundización, podamos madurar convicciones que nos llevan a propuestas concretas para la vida de nuestras comunidades y hermanas de todas las edades, en la Casa Marianela, Atyrá, Paraguay del 22-30 agosto 2012, se han reunido 22 hermanas de las 6 Provincias de la CICSAL para participar en el Seminario, organizado y coordinado por las Hermanas del Equipo de Formación permanente de la CICSAL.
Después de una celebración de inicio e integración comenzamos a recorrer el siguiente itinerario de trabajo y reflexión:
- “Damos voz a la experiencia personal”
- “Damos voz a la experiencia de la Conferencia”. Estudio de la Síntesis de la realidad de la
- “Damos voz a la persona anciana en el hoy de la historia” Dimensión antropológica: Aspecto méy Aspecto Psicológico
- “ Damos voz a Dios en la escucha de su Palabra” Dimensión Bíblica
- “Damos voz a la vida en el Espíritu y a la tradición carismática”
- Trabajo personal y grupal. Convicciones maduradas y posibles indicaciones para el camino.
Confiamos que el Señor y nuestra Madre y Maestra, harán fecundos los trabajos y esfuerzos por ayudarnos a través de esta reflexión a todas las FMA, a volver a “dar vida a los años, en el redescubrimiento y la asunción renovada de la experiencia vocacional, ayudando a las comunidades a gestionar esta realidad con corazón evangélico y a asumir con nuevo impulso la misión educativa salesiana.